El apartamento tiene una superficie de 54 m² y está distribuido en dos dormitorios con armarios, un cuarto de baño con ducha, un lavabo, una cocina abierta y un comedor grande. Dispone además de una terraza de 28 m² que da a una calle tranquila. Se puede acceder a la terraza desde el comedor y el dormitorio principal.
La residencia tiene un bonito jardín comunitario muy bien cuidado con un lugar para guardar las bicicletas, dos ascensores y conserje durante todo el año.
La propiedad es perfecta para aquellos que busquen una segunda residencia en pleno corazón de la Costa Brava. A pocos pasos de todo tipo de comercios y actividades turísticas. La playa y el paseo marítimo de Roses están a menos de 50 metros de la residencia.